El 19 de mayo se disputa la final de la Liga de Campeones en el Alianz Arena de Munich. Antes que ese acontecimiento hay otra final que se celebra en el Molinón entre dos equipos que se juegan su futuro en Primera división. Sólo vale un triunfo para seguir soñando con la salvación.
Sporting y Zaragoza se preparan para un encuentro con tintes dramáticos. Los dos equipos necesitan imperiosamente la victoria para subirse al tren de la salvación. La derrota es sinónimo de sentencia y el empate es prácticamente una condena en el camino de penitencia hacia el final de temporada.
Un Zaragoza en plena confianzaLos rojiblancos tienen importantes bajas en defensa. Sus dos centrales se perderán el compromiso por diferentes motivos. Gregoryestá lesionado y Botíasancionado -el Comité de Apelación desestimó el recurso del Sporting-. Gálvez e Iván Hernández serán sus sustitutos. Aunque tampoco se descarta que Eguren retrase su posición. Clemente tiene dudas en la parcela central porque recupera a André Castro y Nacho Cases, ausentes la semana pasada en Bilbao. Rivera mantendrá su puesto pero Eguren podría perder su titularidad. El resto de posiciones parecen claras con Adrián Colunga, De Las Cuevas y Barral asumiendo el rol ofensivo.
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